Archive for the ‘aether’ Category

Automático

Thursday, December 20th, 2012

El hedor que puebla las amígdalas descalcificadas. Se desdoblan las formas y el orden: el corazón palpita a la vista del sol, los ojos no ven más que la oscuridad de su interior, la sangre corre ingrávida en forma de serpientes luminosas. Los cuerpos son idénticos, la individualidad se repliega en una masa amorfa e inaccesible. La visión de los reptiles y el óxido, el ambiente salino, la viscosidad del avasallador perfume de la inconsciencia expuesta y desgarrada.

Me conmueve hasta las lágrimas, florecen las sensaciones más humanas e inciertas. Por primera vez en mi vida  hago preguntas y no espero respuestas. A veces me pregunto si así se siente la muerte.

Desearía haberme comido sus entrañas.

Πάρθος

Wednesday, November 14th, 2012

 

Si no se va a matar, que me avise. Necesito estar seguro de que todo será repentino e incómodo, forzado hasta las náuseas, tan espontáneo como la etiqueta anglosajona. Mi interés es nulo, pero lo ajeno lo recubre de morbo. Me complace que no se muestre indignado… La mayoría de personas toma a mal tanta sinceridad: a pesar de que la vida les enseña a ponerle nombres y apellidos al tiempo, siguen concibiéndolo como una bolsa llena de aire que empieza a materializarse en el instante en que se lo invoca mediante el pensamiento. ¿Qué sucedería si destruyera todos los relojes y espejos que posee? ¿Moriría la conciencia, se disiparía? Los relojes y los espejos son testigos mudos, agentes de las superestructuras espacio-temporales que se infiltran en la cotidianidad y despersonalizan sus usos. ¿Existe acaso algo más íntimo que la ruptura de las proyecciones? Me cobijo en las vísceras y extiendo mis dominios a través de las esponjas que florecen en lo inconsciente; ¿por qué habría de necesitar la confirmación de los reflejos y los ecos? Lo errático del andar permite palpar las fibras sensibles que la luz no llega a revelar. Se tensan las cuerdas, se enajena la sangre, vibran las cavidades glóticas del mundo y la simultaneidad del instante nos encasilla para siempre, nos subordina a la necesaria sucesión de lo vivido. Estamos malditos. Nos recorre el sinsentido y nos ultraja la adrenalina metafísica, nos escupen a la vida y nos ahogan después. Si no se va a matar, que se desgarre las entrañas y comulgue dentro de su propia pira. Cauteriza la carne muerta, vive a través de su recuerdo y amordaza el instinto: esa vida merece ser vivida.

Saturno en Escorpio

Saturday, October 6th, 2012

A las 20:34 GMT. Saturno entra en Escorpio hasta el 23 de Diciembre del 2014. Afectando especialmente  las personas que tengan el Sol, la Luna o el Ascendente en Capricornio o Acuario

Con Saturno en Escorpio, te resulta difícil reconocer o admitir impulsos de egoísmo, sexualidad o contracorriente de cualquier tipo. Buscas establecer y preservar tu yo a través del control de las pasiones más potentes y otras reservas de energía. Cierta rigidez y un flujo «congelado» de sentimientos pueden ser el resultado, y prevenir la experiencia de una profunda satisfacción emocional en la vida. Sientes la necesidad de defender y proteger tu estructura emocional a toda costa, lo cual puede ir en contra de tus objetivos y bloquear una relación personal e íntima con otra persona. Para superar tu naturaleza inferior, es decir los instintos animales y apegos materiales, deberías, en primer lugar, reconocer su existencia y luego intentar sublimarla por medio de la práctica del yoga y el desarrollo de una conciencia espiritual. Puedes ser muy testarudo y lanzarte ciegamente a la ruina antes de aceptar un buen consejo. No te tomas nada a la ligera, y en todo buscas un sentido y una profundidad, aunque lo haces de forma demasiado seria y egocéntrica. En vez del humor sano, prefieres la ironía y el sarcasmo, lo cual te puede hacer insoportable, incluso temible. Si eres fatalista y ya no crees en nada, lo más probable es que todavía no hayas descubierto la mina de fuerzas espirituales en tu interior. Ten cuidado de no trabajar hasta el agotamiento para lograr tus metas ambiciosas y, en el camino, arrastrar a otros exigiendo demasiado de ellos. Y procura no ceder ante la tentación de emplear medios ilegales para conseguir lo que quieres. «Pero la sangre no tiene que llegar hasta el río.» Si aprendes de tus experiencias y sacas las conclusiones correspondientes, tu vida mejorará notablemente. Por el lado positivo, sabes muy bien manejar tus recursos, tanto los tuyos como los de otras personas, y podrías ser un magnífico administrador o consejero financiero, abogado o gestor. Gracias a tu perseverancia de acero y tu gran autodisciplina, el éxito está prácticamente garantizado. Tu fuerza de voluntad te deja llegar a cualquier meta que te hayas propuesto.

Mercurio

Wednesday, October 3rd, 2012

Hay muchas cosas que no entiendo ni comprendo, hay cientos de situaciones en las que el escepticismo me juega una mala pasada y también otras en las que temo que esa especie de credulidad me vaya volviendo ingenua e impresionable. ¿Cuál es el punto medio entre el academicismo escrupuloso, casi obtuso, y esas pequeñas verdades que sostienen aquellos que buscan vías alternativas (entre los cuales también se camuflan charlatanes y embaucadores)? Siempre cabe la posibilidad de caer en un engaño: ni el conocimiento ni la experiencia constituyen escudos impenetrables o filtros perfectos que separan lo verdadero de lo falso, lo sucedido de lo interpretado, lo real de lo ilusorio. El hecho de que pensemos en términos tan polarizados nos hace creer que existen verdades, fines, metas, el bien común, el consenso; sin embargo, las encrucijadas y crisis nos muestran que toda elección tiene una consecuencia, favorable para algunos y desfavorable para otros. ¿Cómo podemos estar seguros o no de algo, algún concepto o ideal, si nosotros mismos somos víctimas del tiempo y de sus efectos? Si bien es cierto que todo lo que soñamos (dormidos y también en el sentido de anhelar o idealizar) no puede estar fuera de la naturaleza, ¿sería posible que confundiéramos las visiones fragmentadas de la naturaleza, que el sueño nos empuja a unir y entrelazar tal como si se tratase de una sola entidad?

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Friday, September 21st, 2012

“Si la Luna y el Sol están sinódicos, y Marte se encuentra entre el Sol y la Luna con Saturno en cuadratura, los nativos morirán oprimidos por humores malignos, o serán cautivos de la furia de la locura, o morirán de una muerte miserable en las ondas del mar…”

M

Sunday, September 9th, 2012

M. me llamó hace un rato y dijo que se había enamorado de un Borgia* (a mi parecer, el tipo tiene un aire a Adrian Grenier). Justo me encontraba leyendo “Lo que el viento se llevó”, libro que empecé ayer en la madrugada porque me dio un ataque de nervios al escuchar uno de esos binaural beats. Me olvidé de apagar el estéreo y lo dejé corriendo toda la noche, pero cuando empezaron los zumbidos no pude continuar durmiendo: además de perturbarme el sueño, me ¿hicieron? soñar que estaba en una villa rusa, observando desde la ventana a varias personas que habían cruzado un camino de piedras en el río y descansaban en la otra orilla. Yo quería ir con ellos, pero no se me permitía (o no podía) salir de la habitación (que, curiosamente, tenía un parecido a las de mi casa). Después de un rato, alguien nos dijo (aparecieron un par de jóvenes) que nosotros no podíamos cruzar porque estábamos encerrados en nuestras cabezas, razón por la que nos regresaron a nuestros “tiempos y espacios” originales (me encontraba en la Rusia del siglo XIX, sospecho). Me desperté intranquila, quería regresar a la villa porque había dejado algo o a alguien, sentí una añoranza inexplicable por razones que ni siquiera ahora puedo entender… La cosa es que no pude volver a conciliar el sueño, así que prendí una luz y me puse a leer en la cama, junto al gato. Cuando llegué a la parte en que Scarlett O’Hara maquina su plan para “huir” con Ashley Wilkes, sonó el celular y M. me contó lo que le había sucedido la madrugada anterior.

Los sueños de M. suelen cumplirse, sus corazonadas raras veces se equivocan y cada vez que ella piensa en algo, ese “algo” (ya sea algún suceso o alguien) se le acerca.

* Desde que vimos un capítulo de la serie, nos quedamos prendadas con la trama. Después de un tiempo, conseguí una película de Xavier Dolan en la que aparecía el famoso Cesare, cosa que nos pareció completamente surrealista por motivos que no encuentro pertinente mencionar aquí y ahora.

Infinito

Tuesday, April 17th, 2012

En estos momentos, no puedo recordar con exactitud qué es lo que siento cuando estoy cerca de él. Hace algún tiempo, mi respuesta habría sido bastante más detallada que la que estoy a punto de brindarles en las siguientes líneas. No sé si se debe a que aquellas impresiones, marcadas como hierros candentes en alguna dimensión abstracta con la que me comunico instintivamente, fueron cicatrizando conforme al paso del tiempo, o si simplemente resultaron víctimas de la niebla que impregnó a sus sucedáneos e impidió que me remitieran al verdadero ídolo: él.

No conozco un Amor con mayúsculas, un Amor que no impone condiciones y resplandece por sí mismo. No conozco la abnegación, el sacrificio, la confianza total de quien se entrega ciegamente y pone su vida en manos del ser amado. No conozco la compenetración de almas ni la razón por la cual los individuos abandonan sus propios temores y mecanismos de defensa. No conozco un Amor en el se acepta, se perdona, se olvida y se ama.

Conozco un amor en minúsculas, un amor egoísta y divinizado, inalcanzable, utópico. Conozco la fascinación incontrolable que ejerce el ser amado, la avalancha de sentimientos que impiden tomar una distancia prudente, la ambivalencia entre lo que se adora y lo que se aborrece, la necesidad de fusión, la expectativa de perderse el uno en el otro, el desgarro con el que se abandona todo lo demás, lo implícito de quien acepta la muerte de su propio ser y se debate entre su propia agonía o derrota.

Yo amo a una idea, a la idea de él. Lo conozco mucho, razón suficiente para saber que es tan definible como la marea que oscila, suave en un momento y furiosa en otro. Él no camina, se desliza; no habla, susurra; no ríe, abre su alma; no está, y si estuvo, se fue; está, y si no estuvo, desaparecerá cuando menos lo imagines. Me gustan sus ojos, cálidos y distantes, que reflejan la luz como olas castañas; me gusta su voz, imperturbable y armoniosa, que resuena como el crepitar del fuego; me gustan sus facciones saturninas, místicas, inexpresivas en un momento y llenas de emociones en otro; me gusta su piel nacarada e iridiscente; me gusta su cabello, sus bucles adormitadas que refulgen con el brillo del sol.

Unknown

Thursday, March 15th, 2012
Solía ser taciturno y se aburría con facilidad, tenía un humor muy negro y en la escuela lo tomaban por misántropo. A los demás les intimidaba su manera de mirar, una mirada que habría sido pícara y hasta burlona si no tuviera las cejas tan oscuras y marcadas. Había algo en él que desconcertaba e intrigaba: se asemejaba en todos los sentidos a esos perfumes cuyo aroma es tan exquisito que termina por repeler.

Oh your hair

Monday, February 20th, 2012

Mi cabeza sigue su propio ritmo: se escinde, se ramifica, vuelve a unirse y termina desvaneciéndose. A mi voluntad le han colocado una camisa de fuerza, y tanto ha luchado la pobre que ahora me da pena mirarla a los ojos y pedirle que siga tratando, que no se rinda. Mis sentimientos emergen, silenciosos, en ocasiones inesperadas: durante una película, oyendo algunas canciones, recordando cosas aleatorias y pensando, pensando mucho. Mi fuerza es terrible, ciega, indomable como los caballos salvajes y temeraria como la muerte misma.

Estoy sintiendo el infinito. Leo hasta que mis ojos se desorbitan, hasta que me doy cuenta que todo a mi alrededor es puro caos y yo sigo siendo el eje inmutable que separa lo ilusorio de lo real. Si alguien observase de lejos, probablemente vería que todo está quieto y solo soy yo quien se mueve frenéticamente, como posesa, estirando las manos mientras intento atrapar el aire.

Nomenclatura

Sunday, February 12th, 2012

Escribo desde el balcón, desde algún punto ciego, desde el precipicio. Aves, pequeños xilófonos, flores amarillas caen con ellas y se amontonan en el alféizar de la ventana. Se deslizan los ciclistas, sus piernas originan las revoluciones que solo el tiempo toma en cuenta. Para las flores, ellos no son más que tornados que las dispersan y las destruyen, no son más que criaturas humanoides con las espaldas arqueadas, leopardos que repiten el movimiento frenético que impulsa su desplazamiento. El cielo se mueve, las nubes permanecen fijas como manchas de concreto a punto de secar. Las hormigas transportan los restos de un caramelo que les quité… Las malditas invertebradas recuperaron su tesoro.

Mordí el caramelo: era asqueroso, amargo. ¿Habrá sido una hormiga albina y desmesuradamente grande? Un ciclista, a lo lejos, disminuye la velocidad. Esas ruedas albergan significados ocultos, imágenes cifradas que cobran significado cuando los sentidos se adormecen y el tiempo deja de ser una dimensión irreductible. ¡El tiempo, vástago de Urano! Me invade la sensación de haberlo desenmascarado, ¡maldito filicida! Mi estómago se encoge, se convierte en una espiral, expande el vértigo que llega hasta mi cabeza y grita SUICIDIO, se ramifica y se confunde con mis venas. La risa y la muerte son una sola, la misma tragicomedia que los bienintencionados denominan “drama”. La cabeza sigue sus propios caprichos.

– Pedazo de imbécil, te has comido un hada.

Mis ojos se vuelven líquido encapsulado y emiten un sonido parecido al de las ardillas que rompen nueces. Las ruedas de esa bicicleta, sus jeroglíficos en movimiento, sus enigmas y mi desenfoque constante, su jinete inanimado, las ruedas eternas y las circunferencias que desatan el laberinto mítico de todos y cada uno de los parpadeos que ya no dependen de mí sino del dios de la naturaleza, las gloriosas hormigas que se ríen conmigo y de mí mientras cargan los vestigios de su botín y me doy cuenta que poco a poco paso a convertirme en una frase más dentro del microcosmos de la cordura latente:

SE TE HA DESGARRADO EL INFINITO